Pressy es un sencillísimo controlador para teléfonos Android que consiguió doblar la financiación en Kickstarter en tan solo 24 horas. El motivo es precisamente esta sencillez, que ha convencido a quienes han financiado el proyecto (aparte de fijar un objetivo realista, al contrario que casos como Ubuntu Edge, pero eso es otro tema). Pressy es un pequeño botón que se instala en la entrada de auriculares de los smartphones y al que se pueden asignar diferentes funciones mediante una aplicación gratuita. De este modo se eliminan pasos para realizar algunas de las acciones más comunes.
A esto hay que unir que Pressy, a diferencia de otros proyectos que buscan financiación, está en un estado muy avanzado. No es sólo un prototipo, sino un producto que únicamente necesita una forma de ser fabricado en cadena, ya que funciona y la aplicación está lista.
El funcionamiento de este dispositivo es sencillo. Una vez que se activa la aplicación de Pressy, ésta deja un servicio en segundo plano que monitoriza la entrada jack en la que se conecta el botón. Si en lugar de ello se conectan unos auriculares, se podrán usar si disponen de algún tipo de control. Esto hace que la app sólo se active cuando hay una pulsación (por lo que no consume más batería) y reconozca el comando que ha introducido el usuario para ejecutar la acción. Por el momento sólo es compatible con Android (versión 2.3 o superior), aunque sus creadores no descartan que llegue a iOS a través de Cydia.
Las funciones y las pulsaciones necesarias para activarlas las establece el usuario. Hay varios niveles de profundidad, pues es posible desde usar simplemente las tres que están predefinidas (encender el flash para utilizarlo como linterna, activar o desactivar el modo silencia y hacer una fotografía), a configurar acciones más complejas. Los desarrolladores que contribuyan a la campaña de financiación tendrán acceso a la API para configurar el botón para ser utilizado en sus aplicaciones.
En cualquier caso, hay que tener muy en cuenta que los proyectos de Kickstarter no son la prueba del interés del mercado, sino únicamente de que hay un mercado. No obstante, se trata de uno de varios miles de personas. Está bien, sin duda, pero hay que evitar dejarse llevar por la euforia. Pressy todavía tiene mucho camino por recorrer y debe trabajar mucho para mejorar en el futuro, pero al menos ya es una realidad.