La ejecución de cobros por segundo en llamadas celulares fue uno de los logros más importantes con los que abrió el mercado móvil de Argentina este 2014. La iniciativa, aprobada e impuesta a principios de febrero, representó un avance importante en el desarrollo de la industria nacional, sin embargo, esta nueva dinámica venía integrada con una "letra chica" en el contrato, donde los primeros 30 segundos de cualquier llamada celular seguirían siendo considerados para cobrarse en bloque, haciendo válida la tarifa fragmentaria a partir del segundo 31, lo que a la larga representa cobros reales de mínimo un minuto por llamada sin importar que su duración sea de apenas unos segundos, lo que sumado a la nueva tasa de bonos, se traduce en un cobro que puede ser mayor. El esquema anterior representaba una desventaja final para los usuarios, y este cambio en realidad resulta en una suerte de variación de la realidad anterior, de manera que el propio gobierno de este país toma ya cartas en el asunto para exigir una tarifa por segundo real.
La Cámara de Diputados, de acuerdo con reportes del diario La Nación, discute actualmente un nuevo proyecto en donde evalúa solicitar formalmente a la Secretaría de Comunicaciones modificar la resolución 26 de 2013, la cual ordenaba originalmente este cambio en la tarifa, para adaptarlo a lo que precisamente se supone que promueve: un cobro real de llamadas móviles por segundo, eliminando el cobro inicial por los primeros 30 segundos.
El proyecto fue presentado por el diputado Pablo Javkin (Coalición Cívica-ARI), en una propuesta que de aprobarse tendría efecto inmediato, impactando positivamente en la economía de los usuarios de telefonía móvil del país. De acuerdo con el representante del partido, el primer medio minuto en llamadas móviles tiene un valor que oscila entre el peso y el 1,5, lo que deriva ahora en un costo por minuto superior al que tenía antes del cambio en la modalidad de facturación. El ahorro promedio con este cambio se proyectaba en un 30%, según informa el diario, pero con los aumentos en los bonos el escenario ahora parece todo lo contrario.