Desde hoy entra en vigor la medida de la Comisión Europea aprobada el año pasado: las portabilidades en Europa no deberán durar más de un día laborable. Sin duda una muy buena medida para nosotros, teniendo en cuenta que España es uno de los primeros países europeos en número de portabilidades, que en 2011 llegaron a 5,58 millones de líneas móviles portadas a otras operadoras, entre los motivos más frecuentes está el abaratamiento de la factura o conseguir un móvil, bien sea por el amago o por oferta de otros operadores. Pero ¿cómo funciona la portabilidad? y ¿qué se ha modificado? Vamos a verlo.
¿Cómo funciona una portabilidad en España?
Supongamos que soy usuario de Vodafone y me quiero cambiar a Movistar conservando mi número, lo que haría es contactar con Movistar y ellos iniciarían el proceso de portabilidad, notificándole a Vodafone por medio de un nodo central al que todas las operadoras están conectadas de mi petición. Una vez notificada la petición, Vodafone acepta o rechaza la misma; si se acepta, mediante el nodo central se informa a las demás operadoras del mercado que ahora deben redirigir las llamadas destinadas a mi número a Movistar antes del día pactado, y durante la madrugada de ese día (de 2 a 6AM) se realiza el cambio definitivo, este intervalo se conoce como la ventana de cambio. Después de esta ventana de cambio, mi número de siempre ahora queda asociado a una línea de Movistar, no de Vodafone.
¿Qué ha cambiado?
Básicamente, los plazos en los que cada una de las acciones se debe realizar, si antes eran 5 días laborales, ahora todo el proceso debe quedar cerrado en uno solo. Se reduce el plazo para cancelar el proceso de 3 días a unas cuantas horas, afectando mucho al famoso amago. Por otro lado, con la nueva portabilidad, sólo la compañía receptora del cliente (Movistar en el ejemplo anterior) podría cancelar el proceso, lo que puede dar lugar a empresas que se les pase cancelar la portabilida.
¿Cómo afectará este nuevo proceso?
Aquí habría que diferenciar qué afectaría a quien y de qué manera:
- A las operadoras: creo que son las que más desventajas tienen, ya que este cambio implica modificaciones en el sistema informático de la operadora y procesos de prueba costosos, que pueden prolongarse algunos días. Fuera de estos cambios, las operadoras tradicionales con tarifas que no se adecúan al consumo de sus clientes verán cómo estos se les escapan más rápido.
- A los clientes que de verdad se quieran cambiar: los más beneficiados por sentido común, ya no hay que esperar una semana para tener esa jugosa tarifa de datos o ese deseado móvil.
- A los clientes que quieran amagar: caben dos posibilidades, por un lado que las operadoras hagan ofertas más agresivas en cuanto detecten que te quieres cambiar para que pares el proceso con esa primera oferta o que sencillamente te dejen ir sin más. Teniendo en cuenta la tendencia que se está implantando de no subvencionar móviles, creo que las tentaciones irán directamente a descuento de un cierto porcentaje en factura durante unos meses. Lo que está claro es que las largas negociaciones y horas al teléfono con el departamento de bajas para que te den un Galaxy S II por 0€ sin aumentar permanencia, han acabado.
Por otro lado habría efectos secundarios para las operadoras móviles virtuales, que no poseen tiendas físicas donde puedas recoger la SIM el mismo día y deberán buscar un método para agilizar el envío de la tarjeta a tu casa, fijando el día de la portabilidad en un plazo prudencial; aunque casos se han dado ya con el antiguo proceso de tener la línea cambiada a la otra operadora y aún no tener la SIM en casa.
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