No hay nada que más nos moleste: Estamos manteniendo una conversación tremendamente importante con un amigo para ver dónde salimos esa noche, cuando de pronto nos quedamos sin cobertura y con los planes a medio hacer, ya sea por entrar en un ascensor o por cualquier otra razón. Strand Consult publicaba hace poco una lista de quejas de las operadoras de telefonía móvil mas frecuentes, la cual es sorprendentemente larga. No obstante, son muchos los factores que influyen a la hora de que los usuarios podamos disfrutar de un servicio de calidad, y muchos de ellos, no son fáciles de subsanar.
1. Quiero hacerlo todo y quiero hacerlo ya
Vamos a subir una foto a Instagram, mientras descargamos un juego que prometía, y a su vez, tuiteamos lo bien que nos lo vamos a pasar con el juego y se lo comentamos a cinco amigos por Line. ¿Abruma, no? Algunos usuarios de smartphones se ajustan bastante a este perfil, y luego llegan las quejas de las operadoras que no le dan un servicio lo bastante rápido para poder hacerlo todo en décimas de segundo.
Muchos no entienden que, al igual que puede pasar con la red WiFi de casa, si todos estamos conectados a la misma red y ocupando un ancho de banda mucho mayor del que se supone que deberíamos ocupar, la red se satura. Además, muchas aplicaciones no se encuentran suficientemente optimizadas y acaparan toda la red que pueden y más por si las moscas, no vaya a ser que la preciosa foto de nuestros pies en la playa se retrase unos valiosos segundos en su camino hacia Twitter.
2. Las antenas quedan muy feas y son malignas
Otro gran factor común entre la población y las quejas de las operadoras es el **rechazo hacia las antenas de telefonía, que son precisamente las que nos otorgan esta red móvil que demandamos. Una antena cerca de casa es poco agradable a la vista, que la pongan un poco más allá, donde yo no la vea. Y así sucesivamente hasta que hay que colocarla bajo tierra, donde no vale para nada. Por otro lado, también hay un creciente número de personas que opinan que las antenas emiten radiaciones nocivas, pese a que numerosos estudios científicos muestran que esto no es así.
Es un poco irónico, pues, que entre las quejas de las operadoras se cuente a la vez con el "aquí no llega la red" y el "no quiero cerca de mí lo que me da la red". O una cosa o la otra, pero debemos entender que las dos a la vez son totalmente incompatibles.
3. Un repetidor podría colocarlo hasta yo
Otra queja de las operadoras muy extendida viene dada por la creencia de que los repetidores de red móvil pueden colocarse en cualquier lugar que tenga el espacio suficiente y sea medianamente estable. Algo así como una señal de tráfico, pero un poco más grande. Por ello, entre las quejas de las operadoras muchas veces encontramos usuarios que no entienden por qué en su area no hay una antena cercana.
Menos conocido es el estudio que las compañías tienen que hacer de las condiciones y el perfil de la zona antes de colocar cualquier aparato de este tipo. Aunque nosotros no lo veamos, las antenas necesitan una buena posición** para poder recibir y reenviar la señal con la calidad apropiada. Además, factores ambientales como el clima de la ubicación tienen que ser tenidos en cuenta, porque recordemos que estamos hablando de un aparato bastante delicado, pese a que el principio físico que siguen sea sencillo. ¿Acaso colocaríais un ordenador portátil en la ventana, así tal cual? Yo diría que no (a no ser que estéis buscando una forma alternativa de perderlo de vista, por supuesto).
4. Se les da facilidades y las compañías no hacen nada
Muchas de las quejas de las operadoras vienen a raíz de la lentitud con la que tratan de mejorar su servicio en algunos casos. Los alcaldes o gerentes de turno se empeñan de hablar del tema como si su voz fuese a obrar milagros, y nos regalan los oídos con bonitas palabras y un proyecto de mejora de infraestructuras que, a primera vista, es más que prometedor.
Pero como todo, lo que se dice mediante palabras raramente se hace sobre papel, y muchas veces las compañías se encuentran en situaciones que son incluso absurdas. Por poner un ejemplo, tenemos el caso de La Plata, en Argentina, donde el gobierno multó por un lado a las operadoras por no ofrecer una cobertura de red decente, mientras que por otro no hace más que modificar las leyes para que cada vez sea más difícil extender la infraestructura.
5. Tienen dinero de sobra, pero no lo invierten en sus usuarios
Otra de las más frecuentes quejas de las operadoras es la "poca inversión" que realizan en sus infraestructuras, teniendo en cuenta las ganancias que tienen anualmente. Si bien esto puede ser mas o menos cierto dependiendo de la compañía, tenemos que comprender que la inversión no solo depende de ellas, y que hay otros factores que tienen peso en las inversiones que realiza una compañía.
La realidad es que los dueños de las parcelas que las compañías alquilan para colocar sus torres son conscientes, en muchos casos, de que la empresa necesita estar justamente ahí, puesto que las antenas han de estar a una distancia determinada unas de otras, y las quejas de las operadoras les presionan para colocar más infraestructura. Esto les permite subir el precio de los alquileres, lo que fuerza a las compañías a reducir el número de antenas o a emplazarlas en otros lugares.