Era sólo cuestión de tiempo para que diera a conocer esta noticia, para nadie es un secreto que Dell, a pesar de haber sido de los primeros en adoptar Android cuando comenzó a tener mayor popularidad y Windows Phone cuando comenzó a dar sus primeros pasos, no han logrado tener el éxito al que optaban y poco a poco han demostrado que el mercado móvil, por lo menos el de los teléfonos inteligentes, ya no les interesa realmente.
Los productos de movilidad tienen ciclos de vida más cortos que las computadoras portátiles y de escritorio
Tras esa declaración de un portavoz de Dell, se dio a conocer que se deja de vender oficialmente teléfonos inteligentes dentro de EE.UU., si bien no descartan la idea de volver a ese mercado en especifico, por ahora es una idea que queda totalmente descartada. El primer paso fue descontinuar la Dell Streak 5, un equipo que siempre me pareció interesante pero que no supieron o no dedicaron los recursos como Samsung para lograr que penetrara como un nuevo nicho entre tablet y smartphone, poco después se dejó de vender el terminal con Windows Phone, Dell Venue Pro y por último la Dell Streak 7.
Fueron síntomas que dieron a entender que el mercado móvil les resultaba de poco interés. En varias ocasiones el mismo Michael Dell ha dejado en claro que no sólo son un empresas de ordenadores, ofrecen servicios empresariales y ese modo de trabajo es lo que realmente está dando buenos resultados.
Pero como dije al inicio, lo que realmente se está descartando por ahora es la venta de teléfonos inteligentes con Android o Windows Phone, se espera que cuando Windows 8 salga a la luz Dell retorne con una oferta al mercado móvil mediante una tableta al igual que con algunas portátiles potentes (¿más Ultrabooks?) porque si no lo sabían, también acabaron el sueño de cualquier netbook que creía pasaría a producción. Por lo tanto, debemos esperar una Dell mucho más selectiva a la hora de lanzar nuevos dispositivos enfocados a la movilidad.